lunes, 2 de octubre de 2017

Dando gracias en toda situación

Base Bíblica:

1 Tesalonicenses 5:16-18 (RVR1960)
16 Estad siempre gozosos.
17 Orad sin cesar.
18 Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.

En ocasiones, atravesamos situaciones difíciles, aquellas que parecen que no saldremos de ellas y otras que, nos quitan las fuerzas para continuar. Tomando en cuenta que no me refiero a las situaciones que acontecen por desobediencia a Dios (no pedir su guianza), sino aquellas en la que en determinadas temporadas Dios quiere moldear nuestro carácter y fortalecernos más en Él por medio del enfoque.
Aquí recibimos tres claves para sobrepasar esa situación y salir victoriosos de ella:
1.    1. La primera es, estar SIEMPRE gozosos. Me llamó mucho la atención la palabra SIEMPRE, pues no necesariamente pudieras sentirte así todo el tiempo. Sin embargo, Tu estado de gozo tiene dos vertientes: gozosa por lo que está pasando que habías esperado y gozosa por lo que vendrá que Dios ya dijo, aunque en el momento no lo veas. Ahí está el misterio. Tu gozo no debe ser conforme a tus circunstancias, sino basada en aquel a quien has creído y has entregado el control de tu vida. Las situaciones desagradables pasan, entristecen y agotan las fuerzas, pero la esperanza, el enfoque y la relación con Dios te mantienen por encima de todo eso.

2.    2. La segunda es, orar sin cesar. No es por tus fuerzas, es con Su Espíritu Santo que obtendrás la victoria y pasarás la situación que pudieras estar atravesando. Conectada a la fuente recibes lo indispensable para mantenerte, fuera de esa fuente, que es en Cristo Jesús, ES IMPOSIBLE. Esta oración debe ir de la mano a la lectura y estudio de Su Santa Palabra. Las promesas, estrategias, bálsamo y enfoque lo encontraras ahí, guárdalas y atesóralas en tu corazón.

3.    3. La tercera es, dar gracias POR TODO. Si crees que hasta ahora ejercitarte en los dos primeros ha sido difícil, este punto pone el toque especial. Este es el motivo de este estudio, entrenar nuestra mente, alma, espíritu y corazón, en dar gracias por todo sabiendo que nuestro Dios está al cuidado de todo cuanto nos acontece. Continuando con este versículo añade que esta es la voluntad de Dios para con nosotros y sólo será posible por medio de Cristo Jesús.


Ya sabes, debes dar gracias a Dios por aquello que entiendes por qué pasó, aquello por lo que aún no entiendes y puede que nunca lo hagas, pues está en la soberanía de Dios. Cuando sabes de lo que Dios te ha guardado, ejercitarte en la gratitud se hace más práctico y duradero. 

Dios te bendiga, 
Mujer con Destino en Dios